A 66 AÑOS DEL SUPUESTO PRIMER ENCUENTRO DE GEORGE ADAMSKI CON UN HOMBRE DE OTRO MUNDO.
Hace ya 66 años se produjo el (supuesto, ya que las afirmaciones y negaciones son equilibradas en este ámbito) primer encuentro cara a cara entre un humano y un extraterrestre, se llama George Adamski, quien trabajaba en las inmediaciones del observatorio astronómico de monte Palomar. Nacido en Polonia en 1891, había emigrado a Estados Unidos de niño y dedicó los últimos trece años de su vida a difundir el mensaje de los visitantes de otros mundos por América, Europa y Oceanía.
“Fue a las 12.30 horas del jueves, 20 de noviembre de 1952, cuando establecí contacto en persona con un hombre de otro mundo. Había venido a la Tierra en una nave espacial, un platillo volante”, explica Adamski en su libro Flying saucers have landed (Los platillos volantes han aterrizado, 1953). Había ido al desierto con otras seis personas, ansiosas todas de encontrarse con los extraterrestres. El grupo vio “una gigantesca nave plateada con forma de puro, sin alas ni apéndices de ningún tipo”. Se movía en silencio y, cuando salió de ella un disco volante, el elegido se separó de sus acompañantes con la esperanza de hablar con la tripulación de la pequeña nave e incluso hacer un viaje en ella.